Por Juan Tomás Valenzuela,
El presidente Medina
por fin remeneó la mata,
desbordando las cloacas
con esta acción repentina.
La claque que se aglutina
al rededor de Danilo,
anda ya sacando filo
a machetes y serruchos,
pues se cree que ni Felucho
se le escapa a este mandrilo.
Los nombramientos que ví
son de lo mas que se yó,
pusieron a Andrés Boció
como cónsul en Haití,
el mismo que trajo un Jeep
atiborrado de haitianos,
que vendía visa a dos manos
como si fuera clerén,
violando cualquier retén
en su tráfico de humanos.
Otro que salta a la vista
y me llena de inquietud,
es nombrar en Juventud
a un misogino machista.
El rufián peledeista
guarda prisión hace un mes,
y este, al igual que Andrés,
parece han sido nombrados,
sin haberlos depurado
con cordura y sensatez.
Pero el mayor retroceso
es que a Fello Suberví
lo nombren en EGEHID
como su él supiera de eso.
Fello, que recibe ingresos
de las arcas del estado,
desde que era diputado
en la era de Guzmán,
nadando como Acuamán
en la teta del estado.
El staff del presidente
está de corrupto al pecho,
los hay unos por cohecho
y otros más inteligentes,
que aunque tienen expedientes
por dolo y por corrupción,
se agencian la relación
con la putrida la justicia,
para exhibir su avaricia
como ejemplo de nación.
Después de meter la pata
con el caso de Van Toy,
Danilo nos sale hoy
con su genial fé de errara.
«Me engañán como a la Tata»
dijo, anulando el decreto.
Perdonen el irrespeto,
pero en verdad no sabía
que este carajo cumplía
más de 30 días de asueto.
21 febrero 2018